
Hacia un modelo teórico de la aporofobia
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Acciones e investigaciones Sociales. ISSN: 1132-192X. n.º 43 (2022). Páginas 7 a 40
https://doi.org/10.26754/ojs_ais/accioninvestigsoc.2022436348
TABLA 1. FUNCIONES DE LA VIVIENDA
Función de la vivienda
Consecuencias de pérdida de la vivienda
Protección física de los elementos y el
clima
Riesgo de deshidratación, hipotermia, enfermedades
vasculares periféricas, edemas, etc..
Mantenimiento de la seguridad personal
(protección contra delitos)
Aumento de la inseguridad personal: mayor riesgo de
robos, asaltos y agresiones etc.
Lugar para descansar, lavar la ropa,
asearse etc.
Fatiga, carencia de sueño, irritabilidad, reacciones
lentas, desorientación, falta de higiene, etc.
Lugar para guardar las pertenencias
Necesidad de llevar encima todos los objetos persona-
les y limitación de los mismos
Espacio personal donde estar solo o
acompañado por quien se desee (control
de la entrada)
Estrés, tensión, desmotivación, intrusión de perso-
nas extrañas que pueden ser molestas, expoliadoras
o abusivas; carencia de vida social en el sentido or-
dinario
Lugar propio que refleja la personalidad,
el gusto y la creatividad
Anonimato, desmotivación, exposición aumentada al
alcohol y drogas
Lugar donde se desarrolla la vida familiar
Interferencia con la vida familia, estrés emocional y
desmotivación
Lugar de referencia: dirección, teléfono
Interferencia con la búsqueda de trabajo u obtención
de ayudas y rentas etc.
Símbolo de la pertenencia a la comuni-
dad, facilitación de la acción política
Disminución de la capacidad para participar en la
comunidad, dificultad para votar etc.
Lugar que confiere estatus social
Bajo estatus social, baja autoestima o autoimagen
Inversión (valor económico de la casa)
Bajo estatus económico, capacidad disminuida para
mejorar el estatus económico propio
Fuente. Elaboración propia a partir de Jahiel (1992), Muñoz y Panadero (2004) y Matulic-Do-
mandzic (2013).
Lo que pone de manifiesto, es que la vivienda estable tiene
una función de protección importante, y, por ende, en el caso de
no tenerla deja a la víctima desprotegida.
En algunas ocasiones, estas personas pueden verse involu-
crados en actividades de riesgo, como la mendicidad, la prostitu-
ción etc. que pueden limitar su acceso a la atención de los cuer-
pos de seguridad, bien por falta de confianza al sistema de
protección, o bien por poder ser identificado como autor de algún
hecho delictivo.