Jeux de lettres. Luis Buñuel et Raymond Roussel

Resumen

Autor de una obra literaria singular, Raymond Roussel nunca dejó de fascinar a los surrealistas por su excentricidad, su imaginación caprichosa, antes de representar un hito de la modernidad al revelar, póstumamente, sus métodos de escritura. A pesar de este entusiasmo, Roussel no aparece en la obra de Buñuel. Muy poco citado en sus entrevistas, no es un gran referente para el cineasta. Si aflora en su biografía, es en secreto, de forma indirecta. Cabría entonces preguntarse sobre la naturaleza de la posible relación entre el escritor excéntrico y el cineasta español empapado de literatura naturalista finisecular, dramas picarescos y surrealismo. No hay, aparentemente, en Buñuel una estricta constricción escrita, sino el culto a lo irracional, a la emergencia poética, al dictado automático. Pero sus películas, centradas en la Ley y su transgresión, dan testimonio de una construcción rigurosa, jugando con oposiciones y repeticiones regladas, casi geométricas o musicales. El fantasma de la libertad (1974), su penúltima película, es uno de los ejemplos llamativos.