Alimentando el cuerpo transcendente

Resumen

"Un lenguaje que no repite otra habla, otra Promesa, sino que aplaza la muerte indefinidamente al abrir sin cesar un espacio en que deviene un análogo de sí mismo". Así describe Foucault la estética de la transcendencia, entendida como la experiencia de la infinidad (llámese misticismo, sublime, o écriture postestructuralista) que se produce en un medio que se autoconsume. Este ensayo examina el acto de comer y la figura del cuerpo auto consumidor como las metáforas más básicas de este proceso estético y sugiere que han perdido su relevancia para la transcendencia en un mundo simulado, es decir, en un mundo en que todo, aun el cuerpo, ha sufrido la banalización (el término es de Baudrillard) que resulta cuando el medio se pliega sobre sí mismo, Se propone, además, otras maneras de configurar las metáforas del consumo que son más efectivas en lo tocante a la política cultural.